Ponencias del foro sobre impacto de deportes y disciplinas emergentes

Las conclusiones obtenidas partieron de la base de que la Agenda 2020 es la hoja de ruta del Movimiento Olímpico para las próximas décadas. La transformación social ha motivado que el CIO haya reorientado el futuro de los Juegos con la intención de atender las demandas de una nueva generación. Para ello, ha hecho una evidente flexibilización del programa olímpico, adaptándolo a la cultura y preferencias sociales del país organizador. Muestra de ello es la entrada del street basket 3×3, del surf, del skateboard y de la escalada. Otra consideración es hasta qué punto se puede extender esta catalogación a otros deportes de esta misma categoría y si en la misma tendrían cabida los eSports.

Los deportes emergentes son fruto de la evolución de la sociedad y tienen como denominador común una nueva concepción de la práctica deportiva mucho más lúdica y menos competitiva. Esta nueva manera de hacer deporte como actividad física, en la cual es más importante pasarlo bien que competir, ha empujado a las diferentes federaciones a compaginar el rigor federativo con la flexibilidad que permita mezclar las exigencias de este nuevo modelo con el entendimiento de la práctica deportiva.

Los participantes debatieron también sobre cómo estos nuevos deportes podrían desplazar a los tradicionales. En este sentido, hubo diversidad de opiniones. Es una evidencia que hay un exceso de competiciones y que hará falta un replanteamiento de prioridades. Asimismo, a pesar de que los eSports no son considerados un deporte, los gamers tienen numerosas coincidencias con los deportistas, ya que tienen que hacer una intensa preparación para lograr un exigente nivel competitivo en competiciones estructuradas, tanto a nivel individual como por equipos.

Tal vez la principal diferencia sea de carácter estructural. El deporte tradicional funciona bajo una estructura piramidal (en el vértice del cual está el CIO) y los eSports lo hacen bajo el control de los publishers, que son los generan y administran los juegos. La principal diferencia es el concepto de universalidad del olimpismo frente a los criterios comerciales en que se mueven los eSports.

Por esta razón, a pesar de no considerarlo un deporte, el CIO y los principales agentes del sector de los eSports han abierto una vía de diálogo para difundir a través de ellos los valores olímpicos: Promover videojuegos deportivos, socializar las actividades a través de acciones colectivas y fomentar un equilibrio entre su estilo de vida con la actividad física. Es cierto que viven realidades diferentes, pero a medio plazo podría haber una confluencia que diera lugar a la presencia de un determinado juego en el programa olímpico. Con todos estos indicios y la importante influencia de la tecnología a todos los niveles, hay que preguntarse si el deporte se encuentra ante un inminente cambio de paradigma. La respuesta, apuntaron varios expertos, probablemente la tendremos pronto.

Durante el Forum, se abordó también la importancia de la igualdad de género en el deporte. En los Juegos Olímpicos de París 2024 está previsto que esta sea absoluta: Hombres y mujeres competirán en el mismo número y en la misma cantidad de pruebas. Pero, a pesar de ser importantes, las conclusiones apuntaron a que las cuotas no son la solución definitiva. La igualdad tiene que darse para proporcionar las mismas opciones a las personas, sean del género que sean. Hay que diferenciar también la igualdad en lo que respecta a la práctica y a la gobernanza, que es el gran reto de este apartado de cara futuro. Es preciso potenciar la presencia de la mujer en el gobierno y liderazgo deportivo, así como equilibrar el déficit de entrenadoras y entrenadores. Tampoco las competiciones mixtas son sinónimo de igualdad de condiciones.

Hay que cambiar sustancialmente los criterios educativos de los jóvenes, fomentando la práctica del deporte como estilo de vida, pero sin hacer prevalecer la idea que hay que llegar a ser campeón y orientando la igualdad desde la base. Hay que partir de la equidad sin poner ningún tipo de barrera social al desarrollo deportivo, debiendo ser indiferente que los practicantes sean chicos o chicas.

El Fórum Olímpico se celebró los días 16 y 17 de octubre en el Museu Olímpic i de l’Esport de Barcelona. Estuvo organizado por la Fundació Barcelona Olímpica.

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